domingo, 20 de noviembre de 2011

Espacios Públicos Virtuales

 Muy a pesar de lo que muchos de nosotros creímos alguna vez, el concepto de propiedad privada  ―entendido como el derecho de posesión de cualquier objeto o espacio― es muy reciente en la historia de la humanidad y no es compartido por todas las sociedades humanas. Este concepto, o por lo menos aquel que entendemos hoy en día, tuvo su origen durante el surgimiento del capitalismo. Es tan estrecha la relación entre estos dos elementos que dicho sistema socio-económico se basa en la idea misma de la propiedad privada y en el intercambio de los bienes que cada individuo posee.

Entendiendo que la propiedad privada es el producto de una coyuntura histórica que se enmarca en el surgimiento del capitalismo, concentrémonos ahora en la división política y social entre el espacio público y el espacio privado.  Esta separación espacial es producto de una concepción económica (la propiedad) y de otra política que estaría relacionada con la idea misma del Estado, la cual plantea la existencia de una institución que posee el poder sobre unos individuos en un espacio geográfico determinado. En este orden de ideas, en el espacio privado el control lo ejerce cada uno de los individuos y son ellos los únicos autorizados para utilizarlo. Por otro lado, encontramos el espacio público, que se encuentra bajo el control del Estado y su utilización está dirigida a toda la población. Es así como lo público se determina como el espacio por excelencia en el que la mayoría de los individuos interactúan y se relacionan. Las posibilidades en las que este tipo de interacciones se pueden llevar a cabo están determinadas por el Estado, en quien reside el poder y el control de estos espacios. Esta institución es la que decide qué está permitido y bajo qué condiciones. Sin embargo, estas imposiciones de comportamiento responden a consensos sociales que en cabeza del Estado se ejercen y se ponen en práctica en los espacios públicos. Por supuesto el Estado también interviene en aquellos espacios denominados como privados, pero a diferencia de los públicos, estos se rigen principalmente por el poder de control que sus propietarios establecen sobre ellos. 

Ahora traslademos esta misma dicotomía entre los espacios públicos y privados al campo virtual. Teniendo en cuenta que Internet  se creó en este mismo contexto, sus dinámicas aunque diferentes responden a lógicas similares. En este mismo sentido, podemos observar como la Red desde su creación se ha entendido como un espacio de interacción y de intercambio de información. Sin embargo en su primera etapa el tipo de interacciones que se generaban era de una sola vía, unos pocos emitían la información y los demás tan sólo la recibían. Esa primera fase no permitió una interacción efectiva entre los internautas, que sólo utilizaban este espacio para recibir información, por lo que la Red no se constituyó como un verdadero espacio público que permitiera el flujo de información. Con el desarrollo de la denominada Web 2.0, se crearon nuevos espacios que permitieron que los usuarios de la Red lograran relacionarse e interactuar de múltiples maneras y en una variedad de campos.  Todas estas nuevas posibilidades permitieron que se creara un espacio público en el que se generaba la interacción entre los habitantes de Internet.

A diferencia  de lo que ocurre en el contexto de los espacios físicos bajo la organización socio-política de los Estados, en Internet esos límites territoriales desaparecen y la organización política de dicho espacio virtual adquiere sus propias dinámicas. Es importante tener en cuenta que los campos de interacción que existen en la Red son creados por privados y son ellos los que determinan las posibilidades y las normas para utilizarlos. De esta afirmación se desprenden dos puntos fundamentales de este análisis, el primero de ellos se centra en el hecho de que son esos privados los que establecen la forma en la que se puede o no interactuar  por Internet. Es así como en cada uno de los espacios se establecen formas de interacción dentro de las cuales las más comunes son: chats, foros, likes, taggs, etc., que limitan la manera en la que los usuarios se pueden comunicar. El segundo punto consiste en que dentro de esas posibilidades de interacción, esos mismos privados son los que determinan cuál información se permite comunicar y cuál no. Relacionado con este último punto, es importante cuestionarnos a qué renunciamos cuando abrimos una cuenta de Facebook o Twitter y aceptamos los términos o cláusulas de privacidad que nos exigen para poder adquirir una cuenta.

Teniendo en mente la diferencia entre los espacios públicos y privados, y al  observar la forma en la que se mezclan en la Red, podemos afirmar que son los privados los que controlan y modelan los espacios públicos, pues reglamentan la vida por Internet y remplazan las funciones de control que en un contexto de Estado Democrático se establecerían a partir del consenso y no de agentes privados. 

viernes, 23 de septiembre de 2011

Cyborgs


La asociaciones más comunes que se hacen cuándo se piensa en un Cyborg son: personajes de ciencia ficción,  robots y máquinas. Pero en este artículo pretendo plantear la idea de que todos los seres humanos somos cyborgs desde el mismo momento en el que podemos utilizar una herramienta para suplir cualquiera de nuestras necesidades.

Para Donna Haraway un Cyborg es una criatura hibrida entre un organismo y una máquina, lo que nos lleva a pensar qué podemos definir como un hibrido. Generalmente se llega a pensar que dicha unión entre humano y máquina es el resultado de un injerto al estilo de Robocop o más recientemente de Will Smith. Pero, ¿no somos todos el resultado de híbridos? que nos permiten comunicarnos, interactuar o en mi caso, simplemente ver.  No es necesario tener un cuerpo hecho de metal o  un brazo biónico para ser un cyborg, el sólo hecho de utilizar gafas o lentes de contacto nos hace un producto de la tecnología que nos proporciona una ayuda extra ante una deficiencia. 

Desde hace unos años me diagnosticaron una miopía y astigmatismo, lo que se traduce en que no veo nada. Siempre he pensado que si no fuera porque ya existen gafas o lentes de contacto no podría realizar muchas de las actividades que realizo hoy en día o se me dificultarían bastante. Esta situación no sólo modifica la forma en la que veo, sino también el tipo de interacciones sociales que llevo a cabo. A pesar de que muchos no lo saben, el hecho de utilizar lentes de contacto implica que tengo que ser muy cuidadoso en el momento de entrar a una piscina porque se me puede caer un lente o que no puedo quedarme por fuera de mi casa sin mi caja y mi liquido de lentes, porque no puedo dormir con ellos puestos y he descubierto que dejarlos en agua es una mala idea al día siguiente. De igual forma cuando se me secan los lentes mis ojos se tornan de un color rojo que algunos confunden con algún problema de drogadicción. Más allá de mi situación personal mi punto con todo esto es demostrar cómo nos estamos ayudando todos los días de la tecnología para amplificar nuestras habilidades o tratar de regular aquellas deficiencias, caso similar al de las prótesis o el marcapaso; entre otros desarrollos médicos.

Ya pudimos observar cómo la tecnología suple algunas de nuestras deficiencias, pero ahora analicemos la forma en la que amplifica nuestras capacidades. Gracias a los estudios arqueológicos hemos descubierto algunas de las herramientas que utilizaban nuestros antepasados para simplificar y mejorar cada una de las actividades diarias que realizaban. La caza, la recolección y la agricultura son tal vez los mejores ejemplos de cómo estas nuevas tecnologías permitieron el desarrollo de nuevas formas de alimentación que a su vez ayudaron al cambio en otros aspectos de la vida en comunidad como el sedentarismo, las jerarquías y en general la organización social; que recibimos como herencia hoy en día. Sin entrar en polémicas antropológicas, a lo que voy es a que una de las características que nos diferencian a los seres humanos de la mayoría de las otras especies es la capacidad de utilizar el medio que nos rodea para nuestro beneficio. Es así como podemos ser más ágiles, más veloces y más letales, siendo una especie que se construye a partir de elementos externos, sin los cuales sería indefensa y vulnerable.

Pero todo eso no solo ocurría con los primeros homínidos o culturas “insipientes”, sino que ha seguido sucediendo a través de la historia. Más allá de afirmar que dichas herramientas han evolucionado podemos decir que nos hemos seguido adaptando a las nuevas circunstancias y que cada reto nos hace pensar en una nueva solución. La dificultad que se nos plantea hoy en día esta relacionada con la comunicación,  buscamos reducir distancias y llegar a la mayor cantidad de personas en el menor tiempo. Las sociedades contemporáneas pretenden cada vez más interconectarse unas con otras, impulsadas por necesidades comerciales o de búsqueda de conocimiento han iniciando una carrera por el desarrollo de medios de comunicación más efectivos.   La navegación, el transporte terrestre y la aviación acercaron físicamente a las personas. La radio y la televisión permitieron llegar a mayores audiencias pero implicaban un tipo de comunicación en una sola línea en la que sólo existía un emisor  y una gran cantidad de receptores. La comunicación telefónica por otro lado, implicó un nuevo tipo de interacción virtual en tiempo real que le permitía al usuario recibir y enviar información de forma simultánea. El Internet, en su primera etapa cumplía esta misma función de conectividad pero funcionaba en una sola vía, sin embargo con la aparición de las redes sociales y la simplificación del acceso y la creación de blogs y páginas se desarrolló La Web 2.0 que permitía que los usuarios interactuaran y generaran un tipo de comunicación de doble vía, en la que actuaban como emisores y receptores simultáneamente.

Cada una de las herramientas constituye una nueva forma de interacción entre las personas y nuevos espacios para relacionarse. El hombre se convierte en un nuevo hibrido humano-maquina en el que sólo se puede entender a partir de su relación con los nuevos aparatos tecnológicos que se van desarrollando. En este sentido ni la tecnología determina el comportamiento social, ni la sociedad constituye los desarrollos tecnológicos. Ambas partes poseen agencias, en el sentido de que las personas crean las herramientas pero éstas configuran un nuevo contexto al que las personas se adaptan. Amber Case, antropóloga de UCLA en los Estados Unidos analiza esta situación alrededor de los celulares e identifica cómo estos aparatos funcionan como herramientas portátiles que nos permiten interactuar con cualquier persona en el mundo en cualquier momento, desafiando nociones de tiempo, espacio y de presencia física y virtual. Afirma Case que el celular le permite al hombre una co-presencia en la que se encuentra físicamente en un espacio pero mentalmente en otro, creando lugares privados de conversación aislándose así de lo que sucede a su alrededor y creando su propia realidad  o transportándose a aquella al otro lado del teléfono. El celular permite amplificar la vos, el oído, la vista y los pensamientos, haciendo que los demás experimenten lo que estamos viviendo en tiempo real.

De igual manera funciona con el computador, se vuelve una extensión de nosotros mismos permitiéndonos vivir otra vida a través de la pantalla, compartiendo información por diferentes medios. Un video, un comentario o un simple like nos evocan sentimientos. Se crean reglas de comportamiento en la red, socialmente se determinan espacios por los cuales comunicarnos dependiendo de lo que queremos expresar. En mi caso el mail es para asuntos importantes: trabajo, estudio, cartas interpersonales, etc. Los diferentes espacios de Facebook me permiten realizar una gran cantidad de actividades, pero que están dirigidas principalmente a mis hobies y a actividades de ocio. El Twitter es para difundir información muy específica y el Blog es para escribir este tipo de cosas. Los espacios y las formas de comunicación son culturalmente aprendidas, esto implica que las acciones que se lleven a cabo son susceptibles a aprobación o desaprobación de los demás.

Las sociedades o comunidades virtuales son el relejo del surgimiento de un nuevo cyborg, del híbrido entre el hombre y la máquina. Es aquí donde podríamos plantearnos la pregunta  de si son estas nuevas tecnologías formas de conectarnos o de aislarnos y de si nos dirigimos cada vez más hacia interacciones virtuales, dejando de lado las relaciones físicas cara a cara.  

domingo, 4 de septiembre de 2011

Netnografía



 ¿Qué es la Netnografía?

La Antropología es una Ciencia Social que tiene como objetivo el estudio del hombre en sociedad. Se enmarca dentro de las ciencias porque su metodología de investigación siempre ha intentado producir resultados prácticos y cuantificables, al igual que los de otras disciplinas científicas como  la biología o la sociología. Sin embargo, este objetivo no se ha logrado cumplir a cabalidad  y gracias a ello ha surgido de esta rama de las ciencias sociales una herramienta de investigación alternativa que permite obtener una visión más amplia y profunda  de las interacciones humanas, pero que a su vez les brinda a los investigadores resultados precisos y prácticos. Esta herramienta es la etnografía y es la técnica bandera de la Antropología, su principal característica es la “observación participante” y conociste en la movilización del investigador al campo de estudio para observar y registrar de primera mano los elementos relacionados con su investigación. 

El objeto de estudio de la Antropología clásica era investigar a los pueblos indígenas que habitaran lugares recónditos que desconocían los científicos europeos y americanos y que jamás habían sido registrados por ellos. Fue así como los trabajos de antropólogos como Bronislaw Malinowski se hicieron tan famosos al interior de la disciplina y en el resto de las ciencias sociales, debido a que planteaban la necesidad de salir a investigar lo desconocido en el campo donde se generaba la información. África, Latinoamérica y Oceanía se convirtieron en los espacios predilectos para realizar los estudios etnográficos tratando de conocer a ese otro y sus costumbres. De allí surge la imagen del antropólogo como investigador perdido en la selva, cuya función tan sólo consiste en investigar indígenas y analizar restos arqueológicos. Sin embargo, la Antropología volvió su mirada a su sociedad y a sus costumbres, entendiendo que el objeto de estudio no sólo se encontraba en espacios recónditos y alejados en culturas diferentes a la suya, sino que en el mismo espacio social de occidente se podían realizar este mismo tipo de investigaciones. Fue así como surgió la Antropología Urbana y los estudios basados en las interacciones que ocurren en la ciudad, haciendo del campo de estudio ya no la selva sino las calles, plazas, parques y demás espacios de encuentro de los ciudadanos.

En esa misma línea de investigación, la Antropología ha visto la necesidad de seguir conociendo al hombre en toda su dimensión y para ello es necesario identificar y analizar todos los espacios por los que transita. En este sentido podemos decir que los sujetos ya no sólo conviven en los espacios físicos, sino que gracias al Internet se ha creado un nuevo espacio virtual en el que interactúan y se comunican. A medida que se desarrollan las tecnologías de la comunicación, son cada vez mayores las posibilidades de interacción entre los sujetos virtuales y menos el espacio de relación física. Es por esta razón que la antropología debe volver su mirada al espacio digital para comprender lo que esta sucediendo en este nuevo campo de investigación y debe hacer de su observación participante una inmersión en los medios de comunicación online para comprender qué es lo que ocurre allí y como se desarrollan las relaciones sociales entre los sujetos que utilizan estos medios.

Podemos afirmar que la netnografía es una herramienta de investigación que se utiliza para identificar y comprender las vivencias en la red. Este procedimiento metodológico de las ciencias sociales pretende estudiar las características, prácticas y opiniones habituales de los grupos sociales en Internet. Para poder realizar una buena netnografía lo más importante es identificar el tema y el problema, de allí se desprende el objetivo general y los específicos, una vez se establezcan plenamente estos elementos ya podemos empezar. En todo este proceso es fundamental hallar cuál va a ser la población que vamos a analizar y en que espacios vamos a llevar a cabo nuestra investigación. Es así como blogs, foros, páginas y las diferentes redes sociales podrían ser las mejores opciones para realizar nuestro estudio. Con esos primeros elementos resueltos, podemos continuar con la etapa de recolección y análisis de datos que se divide en dos fases. La primera es la recolección de datos para que consiste en el establecimiento de tiempos de búsqueda y  de la elaboración de un filtro de información que nos permita encontrar mejores datos y más certeros con respecto a nuestro problema de estudio. Ya sea que estemos buscando comentarios, videos, fotos, “twitts”, “likes”, “tags” o simplemente visitas y seguidores lo importante es saber organizar esa información alrededor de nuestro objetivo de investigación para hacer un mejor uso de ella más adelante. La segunda fase es la de interpretación y consiste en organizar de forma más específica esa información que se recogió para poder interpretar y analizar los resultados a la luz de la hipótesis que se haya planteado y del mismo problema de investigación.

La metodología de este tipo de investigaciones resulta muy sencilla, siempre y cuando sepamos hallar unos buenos motores de búsqueda y podamos estructurar muy bien los pasos a seguir antes de comenzar. Lo realmente importante es innovar y tener mucha imaginación a la hora de identificar que se quiere buscar, en que espacios, que información se quiere recolectar y como presentarla.

A los que les interese más este tema los espero en el grupo Antropología Digital en Facebook.  Suerte.


martes, 30 de agosto de 2011

Anonymous




En últimas, ¿qué es lo que sabemos de Anonymous?

Con las revueltas de Mayo del 68 en París y de Haymarket del 86 en Chicago, se empezaron a vislumbrar una nueva serie de movimientos sociales heterogéneos que se articulaban en una sola lucha en contra de los poderes hegemónicos establecidos. En ese entonces, el Estado y los sistemas económicos capitalistas eran el blanco principal de dichos levantamientos, sin embargo, a medida que las circunstancias y el contexto se fueron modificando así también lo hicieron los motivos de las protestas y los objetivos de dichos movimientos. La globalización fue el eje central en torno al cual se gestó toda esta trasformación. Los nuevos medios de comunicación permitieron que cada vez más personas lograran interactuar entre sí, lo cual empezó a construir un sentido ético y moral común, y una preocupación internacional por los problemas locales (fenómeno "glocal"). Para todos aquellos activistas "outsiders" (aquellos que no se ven afectados de forma directa por la situación de conflicto - solidarios en la causa) los problemas medio ambientales y sociales adquirieron una especial importancia, por lo que empezaron a luchar por la conservación de la fauna y la flora mundial (Greenpeace) o por los problemas políticos y de derechos humanos que sufren países subdesarrollados o tercermundistas (Foro Social Mundial  - http://www.forumsocialmundial.org.br/main.php?id_menu=19&cd_language=4) Por otro lado, los "insiders" o aquellos activistas que efectivamente viven en regiones o países en conflicto, articulan todas sus problemáticas con todos aquellos elementos que a la luz de la opinión pública se consideran como relevantes, ya sea la protección del medio ambiente o de los derechos humanos.
Bajo estas premisas, muchos grupos de activistas y movimientos sociales se han reunido bajo una sola vos y se han levantado en contra de fuerzas de poder hegemónicas. Hoy en día el Estado ya no es el único objeto de lucha, las grandes corporaciones como Coca Cola, Nike o Starbucks son ahora susceptibles de movilizaciones en contra de sus acciones, como la explotación de sus trabajadores en diferentes partes del mundo. 

Como ya lo habíamos anotado, los medios de comunicación y en especial el Internet se han convertido en una forma de articular diferentes luchas en una sola y poder expandir las acciones y las voces de protesta alrededor del globo. Pero ¿qué sucede con estas luchas? ¿Son realmente las de todos? o en su interior se acallan muchas otras voces que no escapan a las mismas relaciones de poder por las que tanto se protesta. ¿Qué sucede entonces cuando el medio deja de serlo y se convierte en el fin último? ¿Cuándo la forma de comunicarse termina siendo una forma de empoderamiento que le brinda a todo aquel que la sepa manejar, ya no sólo una vos sino un arma con la cual se puede hacer sentir y hacer que los ojos de los demás se posen en sus acciones y adquirir así la atención de los grandes poderes a los cuales pretende combatir?

El caso de Anonymous es muy interesante en este sentido porque responde a las características de un movimiento social común y corriente, en el sentido que pretende tener una distribución de poder lineal partiendo de la premisa de que no existe una cabeza visible y que todos sus miembros pretender estar en un mismo rango, por consiguiente, es anónima también porque nadie adquiere la vocería sino que todo aquel que lo hace, lo hace en nombre del grupo y de la causa y en este mismo sentido todos luchan por un objetivo en común. Sin embargo, existe un elemento fundamental que puede llegar a diferenciar a Anonymous del resto de movimientos sociales y es el alcance de sus acciones. A pesar de la presión mediática que generan los movimientos y la solidaridad de organizaciones internacionales o de Estados extranjeros que pueden producir un cambio efectivo, las formas de lucha de Anonymous son contundentes y generan la atención y en ocasiones un cambio inmediato, acorde con sus objetivos de lucha. 

Sin entrar a discutir los pros y los contras de un movimiento como este, sí quiero plantear la pregunta de hasta qué punto se conserva esta idea de Anonymous como un grupo de poder lineal que responde a la lucha de la mayoría y en contra de unos pocos empoderados. Hasta qué punto esta comunidad virtual aparentemente libre de jerarquías se libra de los elementos propios de una sociedad como las relaciones de poder. En ese mismo sentido me surgen algunas preguntas: ¿para quién trabaja Anonymous? ¿Para todos o para unos pocos? ¿Quién toma las decisiones de qué acciones se deben tomar, contra quién y cómo llevarlas a cabo? ¿Se hace por consenso? Y si lo hacen, ¿cómo lograr que estas se materialicen si cada uno tendrá una posición y una visión diferente del asunto? ¿No será, que como en toda comunidad siempre las decisiones de unos se impondrán sobre los demás?

Considero que como movimiento social adquiere importancia como un contra poder, pero es importante comprender que entre más poder adquiera, se convertirá en lo que intenta combatir.


Fuentes de información:

http://www.youtube.com/watch?v=Drx8cwG-aKE&feature=player_embedded#!




lunes, 29 de agosto de 2011

Antropología Digital


Mi nombre es José Daniel Serrano y soy egresado de Antropología de la Universidad de los Andes en Bogotá Colombia.

En el transcurso de los últimos años he desarrollado un especial interés por las herramientas de investigación digital y especialmente por lo que se denomina como Antropología Digital. Gracias a la experiencia que he adquirido en la agencia de publicidad Sancho BBDO, en la cuál me encuentro trabajando actualmente en el área de investigación, he descubierto en mi trabajo como analista esta nueva rama de la Antropología y su principal herramienta que se conoce como netnografía o etnografía digital. En el transcurso de mi investigación teórica me he nutrido de los trabajos de Robert Kozinets - Profesor de marketing de la Universidad de York en Canada y de Miguel del Fresno -  Consultor Senior en marketing y Comunicación Online en Madrid España; esto con respecto a los trabajos relacionados con marketing e investigación de mercados. Recientemente descubrí los trabajos de Mike Wesch -Profesor asociado de Antropología Cultural en Kansas State University en los estados Unidos - relacionados con etnografías realizadas por Youtube a partir de un análisis de los videos que los usuarios han subido a la red. Sumado a sus investigaciones, el profesor Wesch ha desarrollado todo un programa de Antropología Digital en dicho departamento de la Universidad de Kansas, subiendo diferentes materiales visuales a la red que muestran los alcances de sus investigaciones y algunos aspectos teóricos de lo que él considera que es esta nueva rama de la Antropología y cómo se puede utilizar. He descubierto también las investigaciones de Gabriella Coleman - Profesora asistente  en Media, Culture and Comunications de NYU en los Estados Unidos -  cuyos trabajos se centran en el estudio de la política digital centrándose específicamente en  el caso de Anonymous. 

Mi objetivo en el futuro es lograr articular toda esta información en herramientas prácticas y concretas de investigación digital que me permitan conocer este nuevo mundo virtual y las comunidades digitales que se se desprenden. Las posibilidades son tan grandes como la ambición por conocer cada uno de los espacios de comunicación que la red nos permite. Siendo el estudio del hombre el principal objetivo de la Antropología, es muy importante que logremos como investigadores sociales acceder a cada uno de los rincones en donde se presenta la interacción humana y lograr así comprender a profundidad como se configuran las formas de pensamiento y las características  de los diferentes individuos que acceden a la red. 

La Antropología debe ir entonces de la mano con las nuevas tecnologías para poder comprender al ser humano en toda su dimensión.